Persona mayor autónoma: incluye a las personas mayores de 65 años, sanas y afectas de enfermedades (agudas o crónicas) no potencialmente incapacitantes. Persona mayor frágil o de alto riesgo de dependencia: este concepto indica situación de riesgo de dependencia (pero sin padecerla aún), siendo potencialmente reversible, o pudiendo mantener la autonomía mediante una intervención específica. Paciente geriátrico: Si cumple tres o más de las siguientes condiciones: Mayor de 75 años Pluripatología Incapacidad funcional (alto riesgo de dependencia) Deterioro mental Problemática social en relación con su estado de salud