Atrofia del nervio óptico
Es el daño al nervio óptico,
Hay muchas causas de atrofia óptica. La más común es la insuficiencia en el flujo sanguíneo, denominada neuropatía óptica isquémica. El problema casi siempre afecta a los adultos mayores. El nervio óptico también puede resultar con daño a causa de un shock, toxinas, radiación y traumatismo.
Enfermedades oculares, como el glaucoma, también pueden causar una forma de atrofia del nervio óptico. Además, esta afección puede ser causada por enfermedades del cerebro y del sistema nervioso central, tales como:
Tumor cerebral Arteritis craneal Esclerosis múltiple Accidente cerebrovascular
Existen también formas hereditarias y poco comunes de atrofia del nervio óptico que afectan a niños y adultos jóvenes.
La atrofia del nervio óptico ocasiona que la visión se opaque y se reduzca el campo visual. La capacidad para ver detalles finos también se pierde. Los colores parecerán desvanecidos. Con el tiempo, la pupila tendrá menos capacidad de reaccionar ante la luz y finalmente dicha capacidad se podrá perder. Pruebas y exámenes
PruebaS
Visión cromática Reflejo pupilar a la luz Tonometría Agudeza visual
El daño por la atrofia del nervio óptico es irreversible. Se debe encontrar y tratar la enfermedad subyacente, de lo contrario la pérdida de la visión continuará.
En raras ocasiones, se pueden tratar afecciones que llevan a la atrofia óptica. Expectativas (pronóstico)
La visión que se pierde a causa de la atrofia del nervio óptico no se puede recuperar. Es muy importante proteger el otro ojo.