La oclusión de esta arteria que ocurre con mayor frecuencia en la primera parte de la arteria carótida interna (immediatamente más allá de la bifurcación), es con frecuencia silente, mostrando la eficacia de las colaterales orbitarias externas-carótida interna y polígono de Willis; pero en otros casos puede ser causa de masivos infartos que afectan a los dos tercios anteriores de los hemisferios cerebrales. Y en otros aún ser causa de accidentes isquémicos transitorios.

La enfermedad carotídea se considera responsable de, al menos, 20-30% de los ictus cerebrales.

Uno de los aspectos clínicos de la estenosis de la carótida interna, es la influencia sobre la dinámica del flujo de la circulación ocular, por ramas de la arteria oftálmica.

Esta es la razón por la que muchos pacientes con isquemia cerebral en la arteria carótida interna pueden presentar síntomas visuales ipsilaterales (Lamirel y col., 2009).

Se correlaciona con los síntomas crónicos oculares isquémicos como el síndrome de amaurosis fugax o una disminución de la agudeza visual (Costa y col., 1997; Young y Appen, 1981).

La endarterectomía carotídea y la colocación de stents en la arteria carótida, también puede restablecer la presión de perfusión cerebral y mejorar la hemodinámica vascular, reduciendo el riesgo de ictus en pacientes sintomáticos y asintomáticos (Taylor y Barnett, 1991: Rothwell y col., 2003).

Es eficaz en la mejora de la circulación ocular, debido a la estenosis de la arteria carótida (Kawaguchi y col., 2012).

Angiografía Cerebral

Duplex Ultrasonidos de Carotida

Angiografía por Resonancia Magnética

Angiografía por Tomografía Computarizada

Bibliografía

Costa, S. Kuzniec, L. J. Molnar, G. G. Cerri, P. Puech-Leao, and C. A. Carvalho, “Clinical findings and hemodynamic changes associated with severe occlusive carotid artery disease,” Ophthalmology, vol. 104, no. 12, pp. 1994–2002, 1997.

Kawaguchi, Shoichiro, Jun-Ichi Iida, and Yoshitomo Uchiyama. 2012. “Ocular Circulation and Chronic Ocular Ischemic Syndrome Before and After Carotid Artery Revascularization Surgery.” Journal of Ophthalmology 2012: 350475. doi:10.1155/2012/350475.

Lamirel, N. J. Newman, and V. Biousse, “Vascular neuro-ophthalmology,” Handbook of Clinical Neurology, vol. 93, pp. 595–611, 2009.

Rothwell, M. Eliasziw, S. A. Gutnikov, et al., “Analysis of pooled data from the randomized controlled trials of endarterectomy for symptomatic carotid stenosis,” The Lancet, vol. 361, pp. 107–116, 2003

Taylor and H. J. M. Barnett, “Beneficial effect of carotid endarterectomy in symptomatic patients with high-grade carotid stenosis,” The New England Journal of Medicine, vol. 325, no. 7, pp. 445–453, 1991.

Young and R. E. Appen, “Ischemic oculopathy. A manifestation of carotid artery disease,” Archives of Neurology, vol. 38, no. 6, pp. 358–361, 1981.