Su utilización en la fase aguda del paciente neurocrítico, particularmente en el traumatismo craneoencefálico (TCE), está poco extendida debido a la escasa implantación de la técnica en las UCI.

Los cambios hemodinámicos después de la lesión cerebral grave son relativamente comunes y es una herramienta útil para el seguimiento de los cambios hemodinámicos intracraneales ¹⁾

Se trata de una técnica ultrasonográfica que, en tiempo real y de modo simultáneo, permite el estudio ecográfico bidimensional del cerebro, la visualización en color de los vasos arteriales y venosos basales y el análisis del espectro doppler de los mismos. Se realiza a la cabecera del paciente, es inocua y repetible cuantas veces sea necesario.

De acuerdo a los cambios de flujo en las arterias cerebrales se puede detectar las velocidades basales, la presencia de hiperemia cerebral, vasoespasmo, y oligoemia.

En casi el 50% de los pacientes se produjeron cambios hemodinámicos significativos. El hallazgo patológico más frecuente fue la hiperemia (31,8%), seguido de vasoespasmo (10,9%) y oligoemia (9,1%).

Los cambios hemodinámicos tras una lesión cerebral grave son hallazgos relativamente comunes.

La ecuación PIC = 10.927 x índice de pulsatilidad - 1.284, permite el conocimiento de la PIC y CPP, sin embargo, las intervenciones terapéuticas adecuadas exigen una evaluación contínua ²⁾